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Corella es conocida popularmente como la <<Ciudad del Vino y del Barroco>>.
Situada en La Ribera de Navarra, cuenta con bodegas donde se elaboran caldos de extraordinaria calidad, que han llevado al Vino de Corella a hacerse un nombre propio dentro del mercado nacional e internacional.
Corella, alberga unos de los más importantes cascos históricos de La Ribera Navarra, con una importante arquitectura civil y religiosa del barroco, en cuyas calles se hallan palacios, casonas, así como un gran número de conventos e iglesias que datan de los Siglos XVI y XVIII.
Dignas de mención son sus numerosas casas solariegas blasonadas en el plano de la arquitectura civil, y las monumentales Parroquias de San Miguel y El Rosario, junto con los Conventos del Carmen, Aracelí y la Ermita de la Virgen del Villar en cuanto a arquitectura religiosa se refiere.
Junto a ellos, y también como punto clave, se encuentra el Museo Arrese, donde poder disfrutar de una majestuosa muestra de arte religioso de diferentes épocas.
Todo ello hace de Corella una ciudad de gran atractivo para el visitante, que disfrutará de la acogida y hospitalidad de sus habitantes, propia de La Ribera de Navarra, dentro de un marco histórico-artístico incomparable.
Bajé de Corella a Alfaro
y me perdí en el camino.
No tuve la culpa yo:
la culpa la tuvo el vino.
En el folleto de Temas de Cultura Popular: CORELLA
El nombre de Corella viene de la interpretación de su escudo (ver arriba). En él hay un conejo y un águila que lo está atrapando. Un rey vió la escena y un paje le dijo: "Corre él" (se refería al conejo). Y el rey le suelta: "Corre ella" (por el águila), el que manda, manda, de "corre-ella" salió Corella.
En el Programa de Fiestas publicado por la Peña El Tonel resalta "La belleza tiene un nombre: CORELLA" resumiendo en un adagio para resaltar la belleza corellana que reza así:
Corella,
la bella,
rica en pan
y pobre en leña.
Jesús Gil Catalán resalta en el pregón del programa de fiestas de la Peña El Tonel este párrafo que ha calado hondo:
"Corella, cuyos moradores son ¿quiénes sino los corellanos? dentro de cuyos derechos a usar el gentilicio incluimos no sólo a los nativos sino que también a los que han fijado su residencia en nuestra ciudad y los años y su laboriosidad les han otorgado merecidamente el título de ciudadanos corellanos".
De ese modo muchos usan trasponiendo su "apellido" como apodo: Angel Corellano, Juan el corellano, etc.
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